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Pequeña historia de Siria

Para poder entender el conflicto que se esta desarrollando hoy en día en

Siria hay que retroceder un poco en el

tiempo Siria es un país con gran importancia

en el ámbito económico mundial, ya que

es una de las primeras productoras de

petróleo del mundo, pero también ha sido

importante durante siglos ya que es un

punto de conexión entre Europa y Oriente.

Sin embargo no podemos hablar del país de Siria hasta después de la Primera Guerra Mundial, antes de eso la zona había pertenecido a distintos imperios (mesopotámico, griego, romano...). Sin embargo el último imperio que dominó este territorio fue el imperio Otomano, hasta la Primera Guerra Mundial. Durante la Primera Guerra Mundial, Inglaterra y Francia se dieron cuenta que no podrían derrotar ellos solos al Imperio Otomano, por lo cual pidieron ayuda a la población que lo conformaba y, a cambio de su ayuda, les prometieron la formación de un nuevo país, "La Gran Arabia"

Aunque les proporcionaron la ayuda para derrotar al imperio, Gran Bretaña y Francia no cumplieron su parte del acuerdo. En vez de crear un gran país unido crearon de forma artificial varios pequeños países. Por supuesto estos países no eran libres y estaban bajo el régimen impuesto por Europa.

Durante los años que se mantuvo este gobierno Francia y Gran Bretaña se apropiaron de los recursos de estas naciones, petróleo sobre todo. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial los europeos se fueron de Arabia, no sin antes crear un último país, Israel, el cual ninguno de sus vecinos reconoce y que ha provocado bastantes conflictos armados. Es importante destacar que aunque el pueblo que se encuentra en esta zona es árabe, éste no es una religión. Los árabes están conformados en su mayoría por musulmanes, pero también hay cristianos y judíos.

Tras la marcha de los Europeos, Siria se convierte en un país muy poco estable. Se producen innumerables golpes de estado para conseguir el poder. Es en ese momento, cuando surge la teoría política de Bazz, esta ideología está conformada por la idea de la arabia unida que se les había prometido, mezclada con ideas socialistas. Es importante decir que esta ideología es laica, no procesa ninguna religión.

Esta ideología caló en todo el mundo árabe muy rápidamente.

En Siria, Al-Assad se hizo con el poder. En Irak, también salió

ganador el partido de Bazz de Sadam Husein, que discrepa con las

ideas de Al-Assad. Esto hizo que la ideología se dividiera en pro-Siria

o pro-Irak y la tensión entre ambos países aumentara.

Mientras tanto en Siria había bastantes problemas y el principal

era por un tema religioso. Aunque la mayoría de los habitantes de

Siria son musulmanes, dentro de esta religión hay dos tipos, los

Suníes, que son el 70% de la población, y Chiíes que son apenas

un 13%. Sin embargo, son estos últimos los que tienen el poder político y militar. Esto hace que haya una gran tensión en el país, pues aunque éste es laico, la población Suní no está de acuerdo con que la Chií dirija el país.

Este sentimiento es aprovechado por la oposición de los Hermanos Musulmanes, un grupo de islamistas radicales. Realizan una pequeña revuelta, la cual se salda con la muerte de civiles y el encarcelamiento de aquellos que participaron.

En el año 2000, Al-Assad muere y es su hijo Bashar Al-Assad quien le sucede. Para tratar de apalear el ambiente de tensión, libera a muchos presos políticos y permite la llegada de internet para dar cierta apariencia de libertad al régimen. Se abre así un periodo de debate político en el cual vuelven los Hermanos Musulmanes, y aparecen nuevos partidos. Sin embargo, éstos rápidamente son encarcelados por sus ideas.

En este periodo el presidente George Bush incluye Siria en el eje del mal, lo cual complica las relaciones internacionales de Siria, los demás países no quieren comerciar con ella. Nuevamente empieza un periodo de protestas, ahora por parte de los Kurdos, un pueblo que vive distribuido por la zona norte de Siria. Otra vez las protestas se saldan con muertos y encarcelados. Tras esto ocurre la llamada primavera árabe, que es un conjunto de protestas cuyo fin es obtener más democracia en los países árabes, y estas protestas se dan en todos los países de pueblos arábigos, no solo en Siria. En Siria las revueltas se controlan recurriendo al ejército. Su intervención provoca altercados donde la gente muere, y esto acaba derivando en una guerra civil. Se desatan así varios grupos políticos, que se dividen por ser Chiíes o Suníes. Por ser laicos o por ser islamistas. Este es el cuadro político de Siria.

El conflicto que se vive hoy en día en Siria es debido a las ideas radicales de la célula terrorista de Isis, cuya idea es la unificación de todos los países árabes bajo un califato. Este concepto viene de la antigua idea de la gran arabia prometida por los europeos.